Préstamo para innovaciones tecnológicas – condiciones más favorables a partir del 1 de junio

A partir del 1 de junio de 2020 se aplican nuevas reglas para la concesión de préstamos de innovación. A partir de ahora, los emprendedores podrán recibir dinero mucho más fácilmente y en cantidades mucho mayores. Los préstamos para innovaciones tecnológicas pueden utilizarse para desarrollar micro, pequeñas y medianas empresas en diversos campos, como el desarrollo de nuevas tecnologías. Gracias a ello, los emprendedores pueden implementar la robotización de la producción o invertir en las últimas tecnologías en robótica.

Un préstamo para innovación tecnológica es un apoyo financiero destinado a desarrollar y aumentar la competitividad de los micro, pequeños y medianos empresarios. Se basa en un bono tecnológico, que es el reembolso de parte de un préstamo tecnológico otorgado por un banco comercial para la implementación de una inversión que tiene como objetivo apoyar el desarrollo de nuevas soluciones en una determinada empresa. Esta financiación cubre hasta 70% de costes de inversión elegibles. Todos los fondos provienen del Programa Operativo de Crecimiento Inteligente de la UE 2014-2020.

Debido a la pandemia de Covid-19, el Ministerio de Fondos y Política Regional, en cooperación con el Banco Gospodarstwa Krajowego, operador del programa Crédito de Innovación, ha preparado una serie de cambios relacionados con la concesión de financiación. Al mismo tiempo, se acortó la convocatoria anterior y el plazo se trasladó del 24 de junio al 31 de mayo. De esta forma, a partir del 1 de junio podrían entrar en vigor nuevas normas en materia de préstamos a la innovación. ¿Qué hay de nuevo en estos cambios?

A partir del 1 de junio se suprime el límite máximo para las bonificaciones tecnológicas. Anteriormente existía un límite de 6 millones PLN para cubrir los gastos de inversión. Actualmente, no existe tal limitación. El importe de la financiación en sí depende de la ubicación del proyecto y del tamaño de la empresa, pero cubrirá un máximo de 70% de costes de inversión elegibles. El empresario debe aportar el resto.

Los supuestos anteriores del préstamo para innovaciones tecnológicas suponían que la idea tenía que ser innovadora a escala nacional: el empresario tenía que demostrar que el proyecto que presentaba era único y no había sido duplicado. Actualmente, se ha eliminado la necesidad de innovación a escala nacional, por lo que se puede introducir a escala empresarial, es decir, implementar en la empresa productos y servicios que no se habían ofrecido antes.

Para recibir financiación para la innovación, es necesario cumplir las condiciones adecuadas, incluido el uso del dinero para gastos subvencionables, es decir, cubiertos por el reembolso. El cambio actual ha ampliado su catálogo, gracias a lo cual los emprendedores podrán gastar los fondos en cosas adicionales. Entre los nuevos gastos subvencionables aparecieron los siguientes elementos.

• El costo de compra, montaje y puesta en servicio de activos fijos, así como los costos de su transporte. A partir de este momento también se reembolsarán los gastos de transporte de maquinaria y equipos, así como otros activos fijos, que no fueron cubiertos en el proyecto anterior. Gracias a esto, el empresario podrá encargar máquinas y dispositivos desde lugares lejanos sin temor a que los costes de transporte superen el precio del propio dispositivo.
• Trabajos y materiales de construcción. – con el fin de construir o ampliar edificios – en el proyecto anterior no era posible invertir en edificios e inmuebles, especialmente en materiales de construcción, y no era posible cubrir los costos del equipo de construcción.
• Compra de activos intangibles en forma de patentes, licencias, know-how y conocimientos técnicos no patentados. – las regulaciones anteriores sólo definían la posibilidad de comprar el software necesario sin la posibilidad de adquirir conocimientos o comprar patentes y otros elementos intangibles necesarios para introducir innovaciones;
• Estudios, peritajes y proyectos técnicos necesarios para implementar una inversión tecnológica elaborados por asesores externos – anteriormente, el empresario tenía que cubrir todos los costes de los conocimientos científicos necesarios y el desarrollo de proyectos técnicos. Sólo se cubren financieramente la investigación y los conocimientos realizados por el propio empresario, siempre que disponga de los recursos científicos y tecnológicos adecuados.
• Costos de alquiler y arrendamiento de terrenos, edificios y estructuras. – este es un cambio muy grande. El proyecto anterior suponía que el empresario tenía que financiar él mismo todos los bienes inmuebles, independientemente de si los compraba o los alquilaba (o alquilaba). El cambio actual aumentará las oportunidades para que los empresarios compren bienes inmuebles para el desarrollo de su empresa.

En la versión anterior de la cofinanciación era necesario aportar la contribución propia 30%. Actualmente, esta también es una de las condiciones para la concesión de financiación, pero hay una excepción. Si el emprendedor demuestra que su solvencia lo permite, el banco que otorgará el préstamo para la inversión podrá otorgar un préstamo tecnológico para financiar hasta 100% del valor del proyecto. Gracias a esto, muchas empresas podrán solicitar un préstamo mucho antes, porque no estarán limitadas por la necesidad de realizar una contribución 30% a la inversión, cantidad que tendrían que recaudar de sus propios ingresos.

Un emprendedor que quiera obtener un bono tecnológico debe primero presentar una solicitud de préstamo tecnológico en cualquier banco comercial. Luego, tras obtener una promesa o firmar un contrato de préstamo condicional, presenta una solicitud de financiación del proyecto al Banco Gospodarstwa Krajowego (durante el concurso). Si se aprueba, BGK promete un bono tecnológico y el empresario firma un acuerdo con el banco. Luego, el Banco Gospodarstwa Krajowego firma un contrato de cofinanciación del proyecto con el empresario y paga una bonificación tecnológica como parte de los pagos intermedios, así como como parte del pago final, una vez finalizado el proyecto.